¿Eres dueño de tu pasado?

Si tienes pulso, tienes un pasado.  Todos tenemos cosas en nuestro pasado que preferiríamos no recordar, porque al recordarlo nos hace sentir incómodos.  

Tal vez fueron los novi@s, tal vez un apodo que le decíamos  a un compañero de clase a sus espaldas, o la chica que perseguías en la escuela o el matrimonio fallido que finges que nunca sucedió.

Pablo , en su primera carta a un joven pastor llamado Timoteo, nos muestra cómo recordar el pasado nos ayuda a apreciar el presente.  

Después de declarar abiertamente sus errores del pasado, Pablo dice:  

\”Le doy gracias a nuestro Señor Jesucristo, porque ha confiado en mí y me ha dado fuerzas para trabajar por él. Antes yo ofendía a Jesucristo, lo perseguía y lo insultaba. Aun así, él confió en mí. Y es que Dios fue bueno conmigo y me perdonó, pues yo todavía no creía en Cristo ni sabía lo que estaba haciendo. Nuestro Dios me amó mucho y me perdonó: por medio de Jesucristo me dio confianza y amor.\” (1 Timoteo 1: 12-15). TLA

 Ninguno de nosotros fue lo suficientemente bueno como para ganar un lugar en el cielo, ni siquiera Pablo, quien comenzó iglesias en todo el mundo y escribió la mitad del Nuevo Testamento.  

La salvación es un regalo que no merecíamos y que no ganamos.  Cuando omitimos partes de nuestra historia o pretendemos que siempre hemos sido tan piadosos, esto abarata el sacrificio que Jesús hizo en nuestro nombre.

 Ansiosos por olvidar nuestro pasado, es solo cuando dejamos de fingir abandonamos nuestros frentes perfectos y reconocemos cómo Dios nos salvó de nuestro pasado desordenado que podemos experimentar la libertad de la gracia de Dios.

 Hoy te invito a reflexionar:

•  ¿De qué parte de tu pasado te avergüenzas o te apenas de recordar?

• Cuando piensas en quién eras antes de conocer a Jesús y quién eres ahora, ¿qué diferencias ves?

•  ¿Cuándo fue la última vez que compartiste tu historia con alguien?  

*Pídale a Dios una oportunidad para compartir cómo ha cambiado su vida.*

Te invitamos a compartir tu testimonio de lo que Dios ha hecho en tu vida ❤️.

Dios usa nuestros testimonios para ayudar a personas que están o pasaron por lo mismo y no ven una salida.

Bendiciones