Antes que los montes fueran engendrados, y nacieran la tierra y el mundo, desde la eternidad y hasta la eternidad, tú eres Dios.
– Salmos 90:2
Hoy desperté con una canción que decía “Al estar ante ti caminando frente el mar de Cristal, entre la multitud en asombro allí me habré de postrar” y recordé que todo es temporal, pero que nos mantiene una esperanza y esa es la promesa de Jesucristo quien nos ha prometido vida eterna.
Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
– Juan 17:3
Hoy solo quiero decirte que no pierdas la mirada en Cristo y sigas perseverando. Puedes estar pasando por un momento difícil, pero recuerda que todo es temporal y Dios es eterno. La tormenta no durará para siempre y Cristo nos prometió un lugar donde no habrá llano, ni dolor.
Hay ocasiones en que queremos hacer el trabajo de Dios, queremos intervenir de alguna u otra manera, pero nuestras fuerzas no son suficientes y la posibilidad ante la capacidad humana es casi nula, son cosas que se nos escapan de la mano, pero para aquellas cosas que nos afligen tenemos un Dios que no duerme, un Dios eterno y hará lo imposible posible, el problema que estés pasando no es más grande que el Dios a quien tu alabas, lo único que debemos hacer es lo que está a nuestro alcance y eso es perseverar en el Señor y alabarle cada día.
Una cosa más, no te dejes entretener por aquellas cosas que nos pueden desviar de una relación íntima con el Señor, no olvides lo que verdaderamente importa, confía en el Señor y no te dejes arrastrar por las corrientes de este mundo, eres un hijo de Dios y estás llamado a perseverar y vencer hasta alcanzar la vida eterna.
“Porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Ésta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe”
– 1 Juan 5:4
Dios te bendiga!
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