Un 24 de diciembre después asistir al culto de Navidad en mi iglesia al regresar a mi casa me percaté que alguien se había metido a robar.
Quedé sorprendida porque jamás me había pasado, pero Gracias a Dios no se llevó nada de valor, ni los regalos que estaban debajo del arbolito y agradezco a él Señor que no estaba en la casa en ese momento.
En la biblia se nos menciona a alguien que se dedica a robar, su meta de cada día es robarte la alegría, la paz, el entusiasmo, la fe para que no avances al cumplimiento de las promesas de Dios, usará personas para herirte, circunstancias para hacerte desmayar y no creer en Dios.
La mayoría de los ladrones tratan de buscar por donde meterse y así como ellos, el enemigo tratara de filtrarse en tu vida para quitarte el gozo y debemos reforzar nuestras vidas bajo la protección de Dios.
La Puerta es una abertura que sirve para acceder al interior de un lugar y Jesús tiene algo que enseñarnos.
Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.
Juan 10:9
El enemigo no puede entrar en nuestra vida si entramos por esta puerta, Jesús mismo es esa puerta, quién deja que él entre en su corazón será salvo.
Él nos salva de la depresión, de la ansiedad, culpa, tristeza, enfermedad, escasez, inseguridad, miseria, iniquidades, mentiras, etc.
Observa que dice \”el que entra\” nosotros debemos decidir si entramos por esa puerta o dejamos que el ladrón nos siga robando.
El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
Juan 10:10
Si dejamos que Cristo entre en cada situación de nuestra vida, él nos proveerá para que experimentemos una vida llena de paz.
La mayor expresión de amor que Jesús hizo fue dar su vida por nosotros, tú le perteneces a él, él es bueno y quiere llevarnos a la plenitud de su presencia, donde nos encontramos con él y él gobierna en nuestro interior, restaurando, sanando, liberando cada área.
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.
Juan 10:11
Que en este hermoso día, entres por la puerta del buen pastor donde tu vida será transformada, allí nada ni nadie te podrá destruir porque él será tu refugio y tu fortaleza.
Que Dios te bendiga grandemente.
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