Proverbios.

Desde hace unos días, decidí empezar a leer proverbios con mi hija y mi hermano menor, ambos son adolescentes, una etapa no muy fácil tanto para ellos como para los padres, sean Cristianos o no; pero la verdad es que si los padres vivimos a la luz de Cristo y su verdad, será más llevadero guiarlos y ayudarlos a sobre pasar esta etapa y las venideras.

Cuando empezamos a leer el primer versículo del capítulo 1, “Los proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel.” Mi hermano pregunta que son los proverbios?
La verdad que le respondí vagamente, que era un libro de sabiduría que el Rey Salomón había escrito como consejo a sus hijos, pero me quedó rondando la pregunta. Así que buscando en internet recordé, que los proverbios de Salomón no son los únicos que existen, de hecho existen proverbios Chinos, proverbios Africanos, proverbios Árabes, etc…pero la verdad es que ninguno de esos proverbios se centran de principio a fin en lo principal (DIOS). Y en un ser muy valioso para Dios la Mujer. (Sobre la mujer en proverbios, vendrá otro devocional

Pero…que son los Proverbios? según la Real Academia Española, un proverbio es una adagio o refrán, es decir, un dicho breve que normalmente encierra una doctrina o enseñanza moral. Es un mensaje ingenioso y corto que incita a la reflexión.

En cuanto a su etimología, proverbio es de origen latín “proverbium”, formada por los términos “pro” que significa “hacia adelante” y “verbum” que expresa “palabra”.
Yo lo interpreto así: “Seguir adelante con esa palabra.”

Ahora que aprendí exactamente que es, me conmueve leer que el versículo 7 del capítulo 1 dice: “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.”
El número 7 en la biblia es símbolo de perfección, plenitud. Y el consejo es Si quieres ser sabio, teme a Jehová, sencillo. “Sigue adelante con esta palabra”

Proverbios 2:7 nos dice: “Él provee de sana sabiduría a los rectos; Es escudo a los que caminan rectamente.” Y el 3:7 “No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal;”

No te equivoques, temer a Dios no es vivir pensando en que si me equivoco Dios enviará un rayo y me fulminará (aunque lo merecemos). Pero gracias al Sacrificio de Jesús en la Cruz y su resurrección tenemos misericordia cada mañana. Temer a Dios, es REVERENCIARLO, reconocer cada día, que sólo por medio de él podremos tener la guía correcta para nuestro diario vivir.

Lo más lindo de todo es que la biblia nos enseña en Santiago 1:5 “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.”

(Creo que de no poseer la facilidad para tener una Biblia y que sólo nos dijeran 3 versículos, con estos tendríamos para sustentar nuestra fe por mucho tiempo).

De los más de 600 proverbios que escribió Salomón (si los sume y hay casi mil

En estos 3 pequeños refranes y fáciles de comprender, Salomón guiado por la sabiduría de Dios nos dejó la “guía para seguir adelante”, o “el impulso para seguir adelante” de estos 3 cuál tu escogerías como tu palabra para seguir adelante ?

Qué tal si oramos?
Dios bueno, tu palabra dice: “No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal;” Quizás no sé cómo reverenciarte, o cómo ser sabio (a) en muchas de las decisiones que debo tomar día a día; pero confío en que, en tu misericordia me guiarás; yo reconozco que necesito de tu sabiduría, para mi diario vivir, Gracias Señor por tu amor y bondad. Te agradezco en el nombre de tu amado Hijo Jesús.
Amén