La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
– Juan 14:27
Paz: se refiere a un estado de tranquilidad y seguridad. Es un estado de armonía que está libre de guerras, conflictos y contratiempos.
Muchas veces, en la vida esta es además de la felicidad lo que más busca el ser humano, “LA PAZ”, la que está libre de violencia, de miedo, turbación, nervios, desesperación, que son las principales cosas que se experimentan debido a las diversas dificultades de la vida.
Sin embargo hoy quiero hablarte de la paz, que no es la que el mundo da, y ¿cuál es la paz que da el mundo? Sencilla respuesta, las promesas que el mundo puede dar es pasajera, pero las promesas de Dios son verdaderas y permanentes.
Es por eso que la paz va muy ligada a la confianza en las promesas de Dios, pues aunque pases por distintas cosas sabes que tienes a alguien que va por encima de toda aflicción, desesperación, temor, y ¿sabes quién es? Pues EL ESPIRITU SANTO. Porque fue la promesa del Padre, por petición de nuestro Señor Jesucristo, que no nos dejaría solos porque enviaría al consolador.
Cuando dejamos que el Espíritu de Dios nos llene, nos transforme, nos guie, será manifiesta su paz, porque el ocuparse del Espíritu es vida y paz, sabiendo que si hacemos lo que el Padre nos dice a través de la palabra, con la ayuda del Espíritu Santo venceremos, pues Jesús dice que en el mundo tendremos aflicciones, pero que confiemos porque el venció el mundo pero porque el mismo Espíritu que le fortaleció y le resucito, lo dio a cada uno de los que creen en que Jesucristo es el hijo de Dios, y en oír y obedecer la palabra de Dios.
Por lo tanto, la palabra de Dios habla claramente de que la Paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento guardara nuestros corazones y nuestros pensamientos en Cristo Jesús (Filipenses 4:7), porque es el Espíritu de Dios el que nos ayuda en nuestras debilidades, el que nos consuela y nos da la seguridad de que todo obra para nuestro crecimiento.
Tener paz de Dios, no significa que todo irá bien, más bien quiere decir que aunque todo anda mal, tienes descanso porque has decidido dejar todo en manos de Dios sin necesidad de entrar en polémicas, solo dejar que Dios actúe, porque él tiene cuidado de cada uno y ya nos dio la victoria en Cristo Jesús, solo debemos creerlo, él se encargara del resto.
Decide descansar en el Señor, ocuparte de las cosas del Espíritu, y tendrás la Paz de Dios, a través de la guianza del Espíritu de Dios, el traerá el consuelo que necesitas.
Mateo 11:28
Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados que los haré descansar
1 de Pedro 5: 7
Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
Salmos 4: 8
En paz me acostaré y asimismo dormiré, porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.
¡DIOS TE BENDIGA!
¡CRISTO TE AMA!
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