Mi mamá cuando se enteró que sería abuela por primera vez por parte de mi segundo hermano se puso súper feliz y cuando mi sobrino tenía 2 años le regaló una silla mecedora pequeñita. Al pasar los años mi sobrino creció y ya le quedaba pequeña la mecedora.
Al pasar el tiempo mi hermano volvió a tener otro hijo y heredó la silla de su hermano mayor. Hoy disfruta de esa silla y le encanta sentarse allí.
Te cuento todo esto porque hay objetos que se transmiten al pasar de los años en la familia de generación en generación , estoy segura que quizás tu abuela te regaló algo muy valioso que ella tenía o tu madre y lo conserva contigo porque te lo dio una persona especial para ti.
En el reino de Dios también hay cosas que se heredan , por ejemplo cuando Jesús murió en la cruz por nosotros nos dejó una herencia.
Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una HERENCIA incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero.
1 Pedro 1:3-5
Esta herencia se va traspasando de generación a generación sobre aquellos hijos de Dios que creen en Jesús y se apropiando de ella.
Estamos viviendo tiempos difíciles para la humanidad entera, pero quiero que sepas que hay una promesa para la generación que busca a Dios con todo su corazón.
¡ Me encanta saber eso ! Creo que debes alegrarte conmigo también porque te daré una de las herencias que nos concedió el padre Celestial.
Señor, tú nos has sido refugio De generación en generación.
Salmos 90:1
Él prometió ser nuestro refugio , maravilloso, tienes que declarar esto cada mañana \” Señor, Tú eres mi refugio\” no importa cuál sea la adversidad, tienes un refugio.
Me alegra saber que a si como Dios estuvo con Abraham de refugio hace miles de años atrás, también estará conmigo en este tiempo.
Antes que naciesen los montes Y formases la tierra y el mundo, Desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios. Vuelves al hombre hasta ser quebrantado, Y dices: Convertíos, hijos de los hombres.
Salmos 90:2-3
Es tiempo de volver a Dios, él, es nuestro único refugio en los buenos y en los malos momentos que en realidad son aprendizajes para los hijos de Dios.
Aceptas su refugio ?
Dios te bendiga, no olvides que él te ama y no estás solo.
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