El Evangelio es siempre la respuesta

Esa misma Buena Noticia que llegó a ustedes ahora corre por todo el mundo. Da fruto en todas partes mediante el cambio de vida que produce, así como les cambió la vida a ustedes desde el día que oyeron y entendieron por primera vez la verdad de la maravillosa gracia de Dios. Ustedes se enteraron de la Buena Noticia por medio de Epafras, nuestro amado colaborador; él es un fiel servidor de Cristo y nos ayuda en nombre de ustedes. Nos contó del amor por los demás que el Espíritu Santo les ha dado. – Colosenses 1:6-8

Si te sientes abrumado por la vida, consuélate con esto: Jesús está haciendo nuevas todas las cosas.

La misma buena noticia que te cambió a ti se está extendiendo por el mundo, cambiando a otros de dentro a fuera (Colosenses 1:6). Y un día, todo lo quebrado desaparecerá cuando Jesús regrese para arreglar las cosas.

Esto es el Evangelio. La buena noticia que nos atrajo a la salvación y que sigue llenándonos de esperanza después de la salvación. Cuanto más caminamos con Jesús, más comprendemos el regalo que nos hace cuando nos salva.

Recibimos el perdón del pecado, y obtenemos acceso al Padre. Recibimos el regalo de la vida eterna y el poder del Espíritu Santo. Jesús no sólo nos salva para que seamos buenos un día. Nos salva y nos invita a experimentar su bondad cada día.

No estamos destinados a enfrentarnos solos a nuestras dificultades. Así que apóyate en el Dios que te salvó para que te ayude. Deja que su Espíritu te guíe en lugar de sentir la presión de resolver las cosas por ti mismo. Y confía en los que Dios te ha dado.

Dios te ha colocado donde y cuando estás con un propósito. La casa en la que vives, la gente que conoces – nada de esto es una coincidencia. Al igual que Pablo envió a Epafras para ayudar a la iglesia de Colosas, Dios ha puesto a personas en tu vida para amarte y señalarte Su verdad.

Déjalos entrar y deja que te amen. Hay más cosas que Dios quiere hacer en ti y a través de ti.