Ahora, pues, si he hallado gracia en tus ojos, te ruego que me muestres ahora tu camino, para que te conozca, y halle gracia en tus ojos; y mira que esta gente es pueblo tuyo.Y él (Dios) dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso.Y Moisés respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquí.

Exodo 33:13-15

Es interesante ver como Moises conversaba con Dios, y de esta conversación necesitamos tomar en cuenta una petición muy especial, y se podría decir que única, y fue la siguiente: Si tu presencia no va conmigo, no me saques de aquí. 

Cuando hablamos de la presencia de Dios para mi es inevitable pensar en una ciudad amurallada, un refugio altamente custodiado o algo que tenga que ver con seguridad, paz, calma o tranquilidad. Si te encontraras en un conflicto y estás rodeado de las personas correctas, de seguro tu nivel de preocupación no sería el mismo que si estarías solo.

Y de esto hablaba Moises con Dios, él estaba siendo llamado a salir de un lugar, no solo él, sino junto con el Pueblo de Dios, así que, podríamos estar seguros que su decisión iba a ser determinante no solo para él, sino para muchas familias. Por lo tanto su solicitud fue inmediata, *si no vas conmigo, no me moveré*

Si tomamos la determinación de Moises en muchas de nuestras decisiones, nuestros resultados de hoy en día, seguros fueran muy diferente. Pues tener a Dios de nuestro lado, significa tener al mejor aliado, al mejor consultor de negocio, consejero de vida, abogado, asesor financiero o lo que sea que necesites en ese momento, orientando y dando direcciones de qué debes hacer.

Todo esto el lo hace a través de su Palabra, la cual es lámpara a nuestros pies, y lumbrera a nuestro camino, por tanto, hoy Sábado 28 de Noviembre de 2020, dile a Dios con todo tu corazón, yo deseo estar donde tu presencia este conmigo, quiero hacer exactamente cada uno de tus planes, y sentir la seguridad que estoy dentro de esa ciudad amurallada, en donde podre recibir ataques y podre ser bendecido por que cuento con tu compañía.

Es una petición sencilla, pero de grandes resultados, si no me crees, consulta el Libro de Éxodo 33 y termina de leer todo el capítulo junto con la historia de Moises, la cual de seguro bendecirá tu vida de una forma inimaginable.

Dios continúe Bendiciendo tu Vida.

Dios te Bendiga 

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