Días atrás, encontré una hojita de papel, que tenía un listado de peticiones a Dios, realmente no la estaba buscando, no recordaba que la tenía ahí guardada, la lista incluía desde petición de crecimiento espiritual hasta sanidades, me sentí contenta al encontrarla, ya que algunas de las cosas que tenía ahí se han cumplido; por lo que todo ese día estuve asombrada de ver cómo Dios me había respaldado en su misericordia, al responder la mayoría de las peticiones.

Mientras meditaba en eso, empecé a recordar diferentes peticiones que le hecho a Dios a lo largo de mi vida, ¡¡y waoo!! Que misericordioso ha sido conmigo; pero me di cuenta, que, en las pequeñas cosas, no lo he incluido, eso me dio tristeza.

En ocasiones creemos que sólo debemos incluir a Dios cuando alguien está enfermo, cuando tenemos problemas financieros, o cuando sentimos temor ante una situación de la cual no tenemos control. Pero no debe ser así, debemos incluirlo en TODO.

“Hay camino que parece derecho al hombre, Pero su fin es camino de muerte.”
Proverbios 16:25 RVR1960

Este versículo es tan profundo, que se puede aplicar a muchas situaciones de nuestra vida, pero definitivamente en esta ocasión también; en mi caso, en las cosas que se tengo el control no incluía a Dios, porque según yo “el caso estaba resuelto y ese era el camino derecho”; pero…en muchas ocasiones los resultados no eran los esperados y carecía de paz, mientras que cuando he incluido a Dios, aunque la respuesta no sea lo que yo esperaba al final he sentido paz y al tiempo logro entender porque no se dio de la manera que yo pedí o esperé.

He aprendido, que, al incluir a Dios en las pequeñas cosas, El siempre respalda, y jamás me deja esperando.

Cuando hablo de pequeñas cosas, me refiero a puntos como; ese lugar al que quieres ir, pero que sabes no te edifica, ese amigo que aprecias, pero que no valora tu amistad o te empuja a actuar de la manera incorrecta, la manera como manejas tus finanzas, en fin…creo que la lista es interminable; pero lo que quiero expresarte, es que a Dios le interesa, lo más mínimo de nosotros, y si lo incluimos jamás tendremos camino de muerte como resultado.

Así que;
“Encomienda a Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados.”
Proverbios 16:3 RVR1960

Todo lo que tengas en mente realizar a corto, mediano o largo plazo, entrégalo a Dios, Él te ayudará con las ideas correctas para que se pueda realizar.

Todos siempre planeamos lo que consideramos mejor para nuestro futuro

Y eso es correcto, está bien planificar metas, objetivos de vida, pero si al hacerlo incluimos a Dios y le pedimos que nos guíe, por más difícil que sea el tramo iremos seguros.

“El corazón del hombre piensa su camino; Mas Jehová endereza sus pasos.”
Proverbios 16:9 RVR1960

Dile: Amado Jesús, no puedo negar que tu amor y misericordia me ha sostenido todos los días de mi vida, y que jamás me abandonarás. Hoy reconozco que no te he incluido en todos mis asuntos, creyendo que puedo resolverlos solo(a), por eso HOY, te pido perdón por ello, y te invito a que me guíes, en las pequeñas y grandes cosas de mi vida; no permitas que tome decisiones sin la guía de tu Espíritu Santo nunca más. En tu nombre poderoso Amén.

Que La Paz de Dios te inunde.

LA

 

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