El Entonces De Dios

Palabra

Entonces el secreto fue revelado a Daniel en visión de noche, por lo cual bendijo Daniel al Dios del cielo. Daniel 2:19

Meditación

Por esto el rey con ira y con gran enojo mandó que matasen a todos los sabios de Babilonia. Y se publicó el edicto de que los sabios fueran llevados a la muerte; y buscaron a Daniel y a sus compañeros para matarlos. Entonces Daniel habló sabia y prudentemente a Arioc, capitán de la guardia del rey, que había salido para matar a los sabios de Babilonia. Daniel 2:12-14

Ahora se encuentran frente a un mandato de muerte. No habían hecho nada que hiciera de ellos personas culpables.  Así fue decidido, humanamente, sobre ellos. Estos muchachos se encontraron frente a una orden de muerte. Esta orden amenazaba el propósito santo que había sobre sus vidas. Así mismo, no sabemos qué pueda, como a ellos, estar amenazando tu vida, tu plan, tu propósito.

La Palabra de Dios nos enseña en el capítulo cuarenta y tres versículo trece del libro de Isaías, que no existe nada ni nadie que pueda estorbar lo que hace. Esto es lo suficientemente veraz como para descansar activamente en lo que afirma. Descansar en que así será. Activamente, porque existe una parte no humana que la hace Él. Existe la otra parte que nos corresponde a nosotros. Clamar a Dios

Habló y dijo a Arioc capitán del rey: ¿Cuál es la causa de que este edicto se publique de parte del rey tan apresuradamente? Entonces Arioc hizo saber a Daniel lo que había. Y Daniel entró y pidió al rey que le diese tiempo, y que él mostraría la interpretación al rey. Luego se fue Daniel a su casa e hizo saber lo que había a Ananías, Misael y Azarías, sus compañeros, para que pidiesen misericordias del Dios del cielo sobre este misterio, a fin de que Daniel y sus compañeros no pereciesen con los otros sabios de Babilonia. Daniel 2:15-18

Lo que estaba ocurriendo, movió a estos muchachos a implorar misericordia. Ellos reconocieron que debía existir un plan mejor a su favor. Podemos aprender de aquí, que Dios nos ama, que Dios siempre tiene una salida para nosotros. Ellos se determinaron a clamar. En el cielo existe respuesta para nosotros. Nuestro milagro, muchas veces, está a la distancia de un clamor.

En el libro de Jeremías encontramos un llamado de Dios para clamar. Promete responder a nuestro clamor. La diferencia no la hizo la oración. Nada de lo que hagamos para Dios comprará sus respuestas. La diferencia lo hizo el Dios que responde a nuestro clamor. Él cambia destinos amenazantes. Él es el que conoce nuestros días.

Entonces el secreto fue revelado a Daniel en visión de noche, por lo cual bendijo Daniel al Dios del cielo. Y Daniel habló y dijo: Sea bendito el nombre de Dios de siglos en siglos, porque suyos son el poder y la sabiduría. El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos. El revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz. A ti, oh Dios de mis padres, te doy gracias y te alabo, porque me has dado sabiduría y fuerza, y ahora me has revelado lo que te pedimos; pues nos has dado a conocer el asunto del rey. Daniel 2:19-23

Un entonces de Dios que cambió todo, que cambió el decreto. Así ocurrió con ellos. Así ocurrirá con nosotros. Debemos reforzar la postura de una vida de clamor. Circunstancias pueden estar amenazando de muerte nuestro propósito. Pero aunque una enfermedad, un vicio, un divorcio, una persecución, una pérdida o cualquier otra cosa que podamos nombrar quiera pueden llegar para asediarnos somos escogidos para esperar en nuestro Dios eterno.

Todos estamos expuestos a alcanzar el entonces de Dios. Estamos a la distancia de un clamor. Todos estamos frente a circunstancias bastante parecidas. Recordemos que los mismos padecimientos se van cumpliendo en todos nosotros en todo el mundo. Estos muchachos fueron grandes hombres de Dios, pero esto no los hizo estar exentos de la contrariedad. Por una razón, escrito está que debemos vencer. Vencer lo que Jesucristo ya venció por nosotros en la Cruz. Todo consumado ya fue.     

Después de esto fue Daniel a Arioc, al cual el rey había puesto para matar a los sabios de Babilonia, y le dijo así: No mates a los sabios de Babilonia; llévame a la presencia del rey, y yo le mostraré la interpretación. Entonces Arioc llevó prontamente a Daniel ante el rey, y le dijo así: He hallado un varón de los deportados de Judá, el cual dará al rey la interpretación. Respondió el rey y dijo a Daniel, al cual llamaban Beltsasar: ¿Podrás tú hacerme conocer el sueño que vi, y su interpretación? Daniel respondió delante del rey, diciendo: El misterio que el rey demanda, ni sabios, ni astrólogos, ni magos ni adivinos lo pueden revelar al rey. Pero hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y él ha hecho saber al rey Nabucodonosor lo que ha de acontecer en los postreros días. He aquí tu sueño, y las visiones que has tenido en tu cama… Daniel 2:24-28

Oración

Padre, los padecimientos del tiempo presente no tienen comparación con la gloria que ha de manifestarse. Lo que ahora ocurre muchas veces no lo entendemos a cabalidad. Pero una cosa sí es cierta. Jesucristo venció. Nos has hecho a nosotros, más que vencedores por medio de su amor. Nos postramos ante ti. Reforzamos nuestra postura de clamor. Un entonces traerás. Nunca han decaído tus misericordias. Cumplirás tu propósito en nosotros. Gracias. Amén.