Cuando Dios quiere hacer algo sobre nuestras vidas, muchas veces tendremos que renunciar a lo común para ir hacia lo extraordinario que viene de Dios.
Esto significa que tendrás que hacer cosas que antes quizás no hacías para llegar hacia la promesa de Dios para tu vida, pero es necesaria la fe, porque muchas veces somos incrédulo y esa incredulidad nos puede alejar del propósito.
Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.
Mateo 1:20
En este pasaje estamos hablando de los padres de Jesucristo, lo que Dios les dijo que haría, no les dio todo el plan completo pero sí la introducción.
Que te ha dicho Dios a ti?
Aún no entiendes cómo pasará, pero debes avanzar hacia ese propósito.
En el camino Dios empezará a revelar más su voluntad y no te dejará solo.
El temor aparece cuando desconocemos lo que puede pasar, pero no olvides que el mismo Dios que está en tu presente, también estará en tu futuro.
Cuando Dios engendra algo en ti, nada ni nadie lo podrá estorbar, te verán como raro, pero recuerda que fuiste elegido por Dios para esa misión.
La gente hablará de ti, no te creerán, pero mantente firme creyendo en que él Hijo de Dios será glorificado a través de tu vida.
Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.
Mateo 1:21
No abortes la promesa que Dios te ha dado, continúa, cree, afirma tus pensamientos porque él quiere usarte para salvar a otros así como te salvó a ti.
Que tengas un hermoso día, recuerda que el Espíritu Santo está sobre ti.
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