A dónde tú vayas, las bendiciones del Señor irán

Más Jehová estaba con José, y fue varón prospero; y estaba en la casa de su amo el egipcio. Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Génesis 39:2-3

El domingo predicaba un joven de nuestra iglesia y mencionaba que la bendición va con nosotros a donde vayamos, no podemos sentarnos a esperar a que llegue, debemos caminar para que ella avance con nosotros.

Esta palabra me trae a memoria la vida de José hijo de Jacob (Israel), este hombre de una familia de 12 hermanos tenía sueños y promesas de parte de Dios, pasó por mucho desde ser vendido por sus hermanos hasta ser encarcelado, fue esclavo y sobre todo eso Dios los exaltó en gran manera colocándolo como alguien importante en Egipto, siendo el lleno de sabiduría de Dios.

Me es importante decirte que las circunstancias en que vives no limitan las bendiciones de Dios. No importa donde te encuentres, que tan difícil sea tu situación, a donde tú vayas las bendiciones del Señor están contigo, solo queda de nosotros entregar a Dios un corazón dispuesto a ser guiado.

José se encontraba siendo esclavo, pero el ser esclavo no impidió que los demás vieran la gloria de Dios en su vida y que todo lo que él hacía era bendecido, estuvo encarcelado y en la cárcel Dios estaba con él, por ende, aunque tu casa se este derrumbando, no se derrumbará porque por amor a ti la sostendrá.

Todo depende de la relación que tengamos con el Señor, porque no se trata de una religión sino de una relación, no podemos esperar a que Dios haga todo, y nosotros solo esperando recibir, nosotros debemos entregar nuestra vida por completa a Dios y veremos su favor.

Solamente no olvides y no permitas que los problemas a tu alrededor te cieguen del poder de Dios, porque a dónde tú vayas, en dónde te encuentres allí está el Señor, se trata de accionarla en tu vida, Jesús siempre decía “Tú fe te ha salvado”, y eso es porque la fe provoca milagros.