El polígrafo es un aparato que se utiliza para detectar las mentiras en una persona, lo utilizan para dar empleo en diferentes instituciones.
Muchos reprueban el examen, porque al hacerles preguntas de las cosas que han hecho y mienten, su cuerpo reacciona, su respiración cambia, y lo detecta automáticamente, otros pasan sin ningún problema porque saben quiénes son y dicen la verdad.
Lo cierto es que las mentiras, el engaño y la falsedad se han convertido en algo normal, cotidiano para algunas personas, muchas veces hasta nosotros mismos nos creemos una mentira como si fuese verdad porque se ha hecho común. Hasta usamos el pretexto de que es una mentira Blanca y no es negra, pero en Cristo no hay mentiras de colores.
¿Pero que opina Dios de esto?
¿Quién es el hombre que desea vida,
que desea muchos días para ver el bien?
Guarda tu lengua del mal, y tus labios de hablar engaño.
-Salmos 34:12-13
Hasta esa pregunta, ¿quieres vivir muchos años para ver el Bien? El bien en tu vida, en tu familia, en tus negocios, en tu trabajo, en tus estudios, en tus relaciones?
Allí nos dejaron escrito en el manual, el secreto de vida, No hables lo malo, no engañes.
No necesitas un polígrafo, los ojos de Dios están sobre ti 24 horas al día, no podemos engañarlo
Si en algún momento lo hiciste, puedes ir a tu padre Celestial, confesar tu pecado y Él te perdonará, te dará fortaleza para que lengua hable cosas buenas, hable la verdad y veas los planes de Dios en ti.
De ahora en adelante, seremos verdaderos, diremos la verdad, aunque nos cueste, aunque nos traiga consecuencias porque es mejor agradar a Dios que a los hombres, al final de la historia nos pedirá cuenta de Todos nuestros actos.
Él nos ama, recuerda que quiere lo mejor para ti.
Sé verdadero, Dios respalda la verdad, escoge la vida que Dios quiere que vivas para que te vaya bien.
Dios te bendiga siempre.
