Quiero compartirles algo que quizás ya muchos sepan, pero no es cuestión solo de saber sino de recibir y abrazar el propósito más grande que tuvo una ha persona en la tierra.
Jesucristo no es una simple historia es más real de lo que imaginas y esa verdad debes abrazarla todos los días de tu vida.
A vosotros primeramente, Dios, habiendo levantado a su Hijo, lo envió para que os bendijese, a fin de que cada uno se convierta de su maldad. – Hechos 3:26
Mira este texto, cuál fue la razón por la cual Dios Padre enviar a su hijo Jesucristo, él decide dejar el trono por una sola razón, BENDECIRNOS.
Esto me alegra la vida, Dios nos ama tanto que envió su tesoro más preciado para bendecir a la humanidad y que involucra esa bendición.
El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. -Juan 10:10-11
El pecado nos aleja del padre, nos hace vulnerables a los ataques de enemigo al punto que nos puede destruir y su grandiosa idea fue reconciliarnos a través de su hijo y darnos la oportunidad de tener una nueva vida juntamente con él.
Mira el final, que lo motivó a salir de su Reino por amor a ti y a mi?
Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna. Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. – Romanos 6:22-23
Observa que en hechos y en Romanos dice la misma palabra \”Fin\” es su propósito, su destino, su principal enfoque su meta, era perdonar nuestros pecados a través de su sacrificio en la cruz, ahora somos libre de cadenas que nos mantenían atados al mal y nos regala vida eterna.
Quizás hay cosas que aún en tu vida ves que no están siendo agradables delante de Dios, pero no olvides el propósito, Jesús vino por ti, vino por mi para CONVERTIRNOS, no es con tus fuerzas, es él quien nos va a transformar a su imagen, solo debemos ir a él, reconocer nuestra condición de pecadores y su amor estará extendido siempre para nosotros.
Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira. -Romanos 5:8-9
Despierta cada mañana con la seguridad de que Dios quiere bendecirte, quiere restaurarte sanarte y mostrarte su amor incondicional.
