Uno de los hombres que más admiro en la biblia, es a David, quien fue llamado por Dios como \”el hombre conforme al corazón de Dios.\”
Él era un simple cuidador de ovejas, sin embargo, Dios lo llamó para ser un Rey, pero tuvo que pasar por un proceso para llegar al trono.
La relación de David con Dios era muy especial, él lo adoraba en todo tiempo, hasta en el campo y amaba la presencia de Dios.
En uno de sus Salmos escribe:
Jehová es mi pastor; nada me faltará.
Salmos 23:1
Él estaba seguro de quien guiaba su vida, quien dirigía sus pasos y tenía cuidado de él, por lo tanto, su corazón confía plenamente en que todo estaría Bien.
¿Quién guía nuestra vida?
¿Las circunstancias o somos nosotros mismos quienes tenemos el control de todo?
A veces la adversidad tiene más control sobre nosotros porque no entendemos quien es el Buen Pastor.
Pues aún no está la palabra en mi lengua,
Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.
-Salmos 139:4
El pastor conoce la necesidad de sus ovejas, tú y yo debemos oír su voz y dejarnos guiar, él conoce cada detalle de tu vida, tu pasado, tu presente y tu futuro, Te ama porque eres su hijo.
pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho. Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.
– Juan 10:26-29
Si eres ovejas de su rebaño, déjate guiar por el buen pastor, atiende a su voz, él cuida de ti, confía porque en sus manos estas seguro, nada te faltará.
Puedes confesar con tu boca esa promesa y meditar en sus palabras todo el día en tu corazón, apropia te de ella.
Que tengas un hermoso día, junto al Pastor.
